Hito nº 12

Historia de la Hermandad

La Hermandad se constituyó oficialmente con sus estatutos en 1997.

Ya en el siglo XVI se conoce una devoción de los labriegos del Valle de La Orotava por los Santos Protectores del Campo. Aunque al principio fueron distintos los benefactores, San Benito en la parte baja de La Orotava y San Juan en la zona de El Farrobo de la Villa Arriba. Ambos recibían por separado los distintos cultos con misas y procesiones fruto de la devoción como protectores del campo.

Lorenzo Lima constata que ya en 1700 aparece en los documentos la vísperas, la misa con sus ministros, el sermón y una procesión al término en honor a San Isidro.

A partir de entonces la devoción a San Benito y a San Juan Bautista como protectores del campo se reunifica en la devoción a San Isidro Labrador.

La imagen de San Isidro se ubica en la Ermita de El Calvario, aunque durante el siglo XVIII no se vincula demasiado la figura de este santo con las gentes del campo, fue un proceso lento. Los cultos a San Isidro eran sufragados al principio por gentes influyentes sin apego a las clases populares. No es hasta la llegada del siglo XIX cuando la festividad empieza a hacerse más popular incluso alejada de la religiosidad debido a la crisis de fe.

Esta crisis de fe fue la que acercó a las clases populares a la devoción a San Isidro. Al verse el clero limitado en sus ingresos se vió en la necesidad de solicitar al pueblo que organizara los festejos para cubrir los costes de los cultos a San Isidro. Momento en el que las fiestas populares comienzan a tomar un carácter profano y lúdico, muestra de ello son la decoración de las calles y los desfiles de los labradores ataviados para la ocasión, con sus varas engalanadas y acompañados de su ganado.