María Candelaria Delgado Pérez, conocida por todos como Yaya Febles, recibe el título de Villera de Honor

28/03/2012

María Candelaria Delgado Pérez, conocida por todos como Yaya Febles, recibió recientemente el título de Villera de Honor, un reconocimiento bien merecido por su destacada labor social y cultural. El acto tuvo lugar en su vivienda y contó con la asistencia de la corporación municipal junto a numerosos amigos y familiares.

María Candelaria Delgado Pérez, conocida por todos como Yaya Febles, recibe el título de Villera de HonorEl Pleno del Ayuntamiento aprobó por unanimidad la concesión de este título de villera de honor, atendiendo a la propuesta presentada por distintas organizaciones y colectivos sociales y vecinales del municipio, entre los que se encuentran la Asociación Cultural Rómulo Betancourt, Cáritas Parroquial de la Iglesia de San Juan Bautista, Coro Veniter Creatur, Ong Ansited Canarias y grupos de vecinos de la Villa de Arriba. María Candelaria Delgado Pérez nació el 4 de junio de 1941, y desde muy joven y hasta casi la actualidad siempre, desde un segundo plano, ha dedicado gran parte de su vida a ayudar a las personas que necesitan ayuda y a trabajar para los demás. Entre otras cosas cabe destacar de ella que ha sido durante cuarenta años organista de la parroquia de San Juan Bautista; durante 18 años, presidenta de la Coral Rómulo Betancourt, y durante casi 30 años presidenta de Caritas, organización a la que se dedicó de lleno mientras la salud se lo ha permitido.

Es hija de Eusebia Pérez Delgado, casada en segundas nupcias con Domingo Delgado González, conocido en todos los círculos culturales y musicales de Tenerife por el maestro Domingo Febles. Domingo Delgado González fue un músico y compositor muy importante en su época, dirigió varias bandas de música, entre ellas la de La Orotava, y fue organista de la parroquia de San Juan Bautista durante 60 años. Un paseo en la Villa Arriba, al lado de esta iglesia donde desempeñó su labor, lleva su nombre.

Yaya Febles realizó sus estudios en el Colegio de La Milagrosa, donde recibió clases de pintura y piano de la mano de Sor Sofía, y quizá estos primeros pasos fueron los que le llevaron a involucrarse en la música. Por ello siguió luego con sus estudios musicales, y cuando falleció su padre pasó a ser la organista de la parroquia de San Juan Bautista, actividad que desempeñó durante cuarenta años. También se hizo cargo de la Coral Rómulo Betancourt. Sucedió en la presidencia de ésta a Sotero, y ocupa este cargo durante 18 años, entre 1983 hasta el año 2001. En esta etapa Isidoro Sánchez era el presidente de la Casa Cultural de Rómulo, y gracias a su apoyo y colaboración la coral hizo varios viajes al extranjero. También en los últimos tiempos Yaya Febles colaboró con el coro Veniter Creatur.

Yaya Febles, desde muy joven, siempre tuvo el deseo de ayudar a los demás, y a ello dedicó gran parte de su vida. Así se unió a caritas cuando aún era una adolescente. Hasta el 2010, y durante 27 años, fue la presidenta de caritas de San Juan Bautista. Toda su vida ha estado ligada a esta organización hasta hace muy poco, cuando ya no pudo más por motivos de salud. Su labor ha sido callada y siempre en segundo plano, sin protagonismo, pero muy reconocida por muchas personas a las que ayudó desinteresadamente. Asimismo ayudó en sus inicios a la ONG Asinted Canarias, dedicada al cuidado de los enfermos terminales, indigentes y tercera edad.

Así ha sido siempre la trayectoria de su vida, dedicada por entero a su familia, a caritas, y a los más necesitados. Mientras que la música ha sido y es su pasión. Por ello, en el acto de entrega del Título de Villera de Honor, que fue muy emotivo, se destacaron principalmente los múltiples valores y virtudes de Yaya Febles, y en especial su gran dedicación a ayudar a las personas con más necesidades.