A por el rabo de gato

5/08/2019
Lucha por el rabo de gato en La Orotava

La Orotava se toma en serio la lucha contra la especie invasora 'Pennisetum setaceum' y desde el pasado febrero cuenta con una cuadrilla de nueve personas encargada de controlar su expansión

La capataz agrícola Juana Sosa Abrante dirige una cuadrilla formada por Benjamín Villar, Bienvenida Pérez, Elías Oliva, Estefanía Chávez, Jose M. Fariña, Auxiliadora Rodríguez, Lourdes Álvarez y Tatiana Arbelo. Estas nueve personas, coordinadas por el edil de Medio Ambiente del Ayuntamiento de La Orotava, Luis Perera (CC), se encarga de luchar de lunes a viernes, de 8:00 a 14:00 horas, contra el rabo de gato, una especie invasora (Pennisetum setaceum) que se ha convertido en una amenaza para la biodiversidad en Tenerife.

La Orotava es uno de los pocos municipios del Archipiélago que se ha tomado en serio la lucha contra esta planta ornamental asilvestrada que se incluye en el catálogo de especies exóticas invasoras de Canarias. Perera destaca que la Villa es "el primer municipio en Canarias que cuenta con un diagnóstico inicial y un plan de actuación, que va más allá de actuaciones muy concretas en espacios naturales, ya que aborda todo un territorio municipal".

"Se cree que el rabo de gato o rabogato llegó a Canarias a mediados del siglo XX como planta ornamental, aunque también se habla de que sus semillas pudieron introducirse en áridos y arenas de África. Desde entonces no ha dejado de colonizar espacios, algunos de gran valor ecológico, hasta desplazar a los endemismos", lamenta Perera.

"En La Orotava se detecta entre los 600 metros de altitud máxima hasta la zona de costa. Por cuestiones climáticas no se adapta por encima de esa altura -explica el edil-. Es una especie colonizadora, que resiste la acción del fuego y que en sólo 4 meses es capaz de generar unas 10.000 semillas por planta, con una gran capacidad de dispersión sobre todo por el viento".

El municipio villero dispone desde 2018 este Plan de Actuación Municipal para el Control de la Especie Pennisetum Setaceum, un documento aprobado por todos los partidos políticos. Además, desde marzo de 2019 se puso en marcha la mesa técnica de coordinación de este plan.

Este plan se encargó a la empresa local Bencomia Educación Ambiental, que elaboró un diagnóstico inicial de la situación, un trabajo de campo de inventario de zonas afectadas y un plan de acción que se completó con los resultados obtenidos de un proceso de participación y debate ciudadano realizado el 27 de octubre de 2018.

El Ayuntamiento villero destaca el gran trabajo que realiza la cuadrilla especializada, que trabaja según las indicaciones del plan y, además, gestiona el tratamiento de la semilla con un protocolo de actuación definido. Sus integrantes han recibido formación por parte de especialistas del Cabildo.

Para que el trabajo sea más efectivo, se ha zonificado todo el municipio en diez sectores donde aparece esta especie vegetal invasora, sí como su evolución en la última década.

La labor comenzó en viarios, fincas, barrancos del paraje de El Rincón, donde la especie afecta tanto a los paisajes protegidos adyacentes, como Costa de Acentejo o La Resbala, así como en el barranco de La Arena.

Esta cuadrilla ha actuado ya en algunas de las zonas más sensibles desde el punto de vista ecológico, como El Rincón, el barranco de Las Carretas, Las Dehesas y el Polígono San Jerónimo, donde están ubicados los depósitos de agua donde se ahogan las semillas de esta planta.

Sólo se retiran las espigas, donde están las semillas, y el resto la planta, ya arrancada, se queda en la zona de retirada. Las semillas se sumergen en agua durante tres meses y, posteriormente, se entierran a más de un metro de profundidad.

"Ya hemos realizado una primera revisión en El Rincón, quedando cuatro puntos concretos que por problemas de accesibilidad lo coordinaremos con el Área de Biodiversidad del Cabildo para una pronta actuación", indica el edil.

El grupo de salto del pastor de Ecologistas en Acción, con la colaboración del Voluntariado Ambiental del Cabildo Insular, también está colaborado en el control de esta planta en El Rincón, actuando dentro de los espacios naturales protegidos de Costa de Acentejo y La Resbala desde finales del 2018 con un calendario de actuaciones aprobadas desde la administración competente. El ayuntamiento colabora con dicho colectivo con la retirada de las semillas recogidas.

Esta cuadrilla está formada por personal de los convenios de empleo del Gobierno de Canarias y, desde el área de Medio Ambiente, se subraya su implicación y "el gran trabajo que están realizando día a día".

El consistorio trabaja en la creación de un blog sobre este proyecto, vinculado a la web municipal (www.laorotava.es), que próximamente ofrecerá toda la información que se genere en torno a la lucha contra el rabo de gato.

A juicio de Luis Perera, lo más importante de esta experiencia es que demuestra que "es posible avanzar en el control de esta especie en el municipio, y también en el Valle de La Orotava, si contamos con la participación de los otros ayuntamientos con los que nos me reuniremos en breve".

El edil apuesta por "cuidar al máximo la cuadrilla"

El área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de La Orotava, que dirige Luis Perera (CC), apuesta por "cuidar al máximo a esta cuadrilla, con formación específica en plantas sobre exóticas invasoras". Este equipo cuenta con un logotipo propio, chalecos identificativos, herramientas adaptadas y diverso material complementario. A cada trabajador se le ha entregado el plan de actuación contra esta especie, del que se les informó en una charla, y también acudieron en La Guancha a una jornadas de Gesplan sobre especies invasoras.

Revisiones de zonas tratadas cada tres meses

La capataz Juan Sosa Abrante se ocupa de rellenar las fichas de cada actuación, donde se indica la zona exacta, la densidad de la población y la madurez de la planta y la próxima fecha de revisión. El trabajo de revisión, cada tres meses aproximadamente, es una parte fundamental para erradicar las pequeñas plántulas que pudieran crecer en las zonas ya tratadas.

 

FUENTE: Raúl Sánches / eldia.es