Fundoro cumple este año su 25 aniversario y continúa con su programación anual para divulgar la ciencia

23/01/2024

· La Fundación edita un matasello oficial de correos conmemorativo y un logo especial para este 2024

· Este año se completa la colección museográfica con la incorporación de la nueva sala Fortunatae insulae

La Fundación Canaria Orotava de Historia de la Ciencia (Fundoro) cumple este próximo 2 de febrero veinticinco años de su constitución, por lo que a la programación anual se suman este año otras actividades para la celebración como la edición de un matasello  oficial de correos conmemorativo, un logo especial para este 2024 y la presentación del libro homenaje a José Luis Prieto, quien fue el primer secretario del Patronato Fundoro y un personaje clave para el nacimiento de la fundación, por lo que se le quiere rendir un homenaje recogiendo algunas de sus inéditas publicaciones. 

La entidad, con sede en La Orotava, continúa cumpliendo sus máximos objetivos: promover los estudios, la didáctica y la divulgación de la historia de la ciencia, acercándola, de forma atractiva y práctica, a la población en general y, en especial, a escolares y docentes. La presentación de la programación anual en el consistorio villero corrió a cargo del alcalde villero Francisco Linares y el director de Fundoro, Miguel Ángel González Expósito.

El alcalde Francisco Linares subraya el ejemplar trabajo que ha realizado la Fundación a lo largo de estos veinticinco años, haciendo que “la ciencia esté al alcance de todos”. Con una interesante actividad han conseguido despertar la curiosidad en muchos jóvenes, que luego han dirigido su vida profesional a la investigación o ámbitos científicos. También son numerosos los docentes e investigadores que continúan enriqueciéndose y mejorando su currículo, y muchas las personas que descubren el interés por la ciencia, al hacerla interesante y comprensible. La Fundación, desde su puesta en marcha en 1999, tiene así un papel crucial y Fundoro es hoy en día todo un referente en Canarias, en España y con proyección internacional. Así, cuenta con el total apoyo del Gobierno de Canarias, Cabildo de Tenerife y la institución local. La Orotava presta especial respaldo a este ámbito, y así se ha ganado a pulso ser Ciudad Ciencia.  

El director Miguel Ángel González presentó las actividades previstas para este año, apuntando que el actual equipo directivo llega hasta finales de agosto, por lo que puede haber algunos cambios en la programación en los últimos meses. La agenda anual incluye un año más proyectos formativos, seminarios, simposios, encuentros, jornadas, talleres, exposiciones, rutas, conferencias y otras actividades complementarias. Entre los proyectos didácticos está el prestigioso Seminario Orotava. Durante este año finalizará la XXXIII edición y comenzará la XXXIV, formación para el profesorado homologado por la Consejería de Educación, Formación Profesional y Deportes del Gobierno de Canarias. El Seminario Montesinos es otra propuesta formativa más especializada.

Este año se completa la colección museográfica ‘Viajeros y expediciones científicas en Canarias en los siglos XVIII y XIX’. A la sala Louis Fevillée, dedicada a la Cartografía y Navegación, inaugurada en el 2021, se le une ahora, en el próximo mes de febrero, la sala Fortunatae insulae que acogerá cuatro rincones dedicados a la astronomía, geología y vulcanología, zoología y botánica y psicología comparada. El objetivo general de la colección es recrear el ambiente que se encontraron los viajeros científicos en el archipiélago.

Uno de los proyectos también novedosos para este año es la reconstrucción virtual y en animación 3D de un entorno emblemático del casco histórico como es el tramo que transcurre entre los molinos de las cuatro esquinas y el conocido como Molino de Josefina, incluyendo el antiguo canal de madera que los unía y que no existe en la actualidad. También permitirá al visitante conocer mejor el funcionamiento de estos molinos y el importante papel que desempeñaba el agua.

Durante tres días se llevarán a cabo las jornadas “Terapias biomédicas: nuevas perspectivas” contándose con prestigiosos laboratorios de investigación y comprometidos con la divulgación científica. Este año se cumplen 300 años de la llegada del astrónomo y matemático francés Louis Feuillée a la isla de El Hierro, y por ello Fundoro, la Cátedra Cultural Alexander von Humboldt y Sabin Berthelot de la Universidad de La Laguna organizarán en junio, en la citada isla, un encuentro conmemorativo para celebrar el aniversario de esta primera expedición científica a Canarias para fijar la posición del meridiano cero y determinar la diferencia de longitud con el Observatorio de París.

‘Fundoro va a la escuela’ es un proyecto divulgativo que se desarrolla en los centros educativos de la isla y ofrece resultados muy positivos. Entre las actividades se incluyen rutas histórico-científicas que giran en torno a la medición histórica de la altura del Teide, y también incluye exposiciones y conferencias. Y con el objetivo de divulgar la ciencia de una forma más atractiva, se llevará a los centros académicos que lo pidan cómic-fórums para alumnos, y estos versarán sobre Darwin. 

Con la iniciativa ‘Ciencia Abierta’ se contemplan diversos talleres prácticos que pone a los participantes en contacto con las técnicas y recursos gráficos que utilizaban los viajeros científicos para captar y comprender la naturaleza. La actividad estará abierta al público en general. Además, Fundoro participara, cada quince días, en un programa de la radio La Voz Joven para acercar al público las actividades de la fundación y contribuir al mayor conocimiento de la ciencia. Y otra vía para conseguir este objetivo será a través del teatro, por lo que este año, en marzo, se estrenará la obra Meridiano Cero a cargo del grupo Teatrejo.

A lo largo del 2024 se seguirán diseñando diferentes objetos con imágenes relativas a proyectos desarrollados por Fundoro, se diseñarán nuevas exposiciones y también verá la luz un nuevo número de la revista Meridiano Cero. Asimismo, se continuará con las prácticas externas de alumnos de la ULL, mantenimiento del archivo documental, de la biblioteca, y otras publicaciones.