La Feria de la Ciencia de La Orotava cumple una década

10/10/2013

Diez años. Han pasado diez años desde que un loco por la ciencia y la divulgación convenció a las autoridades municipales para hacer una feria de la ciencia en La Orotava. Ese loco era Juanjo Martín a través de su empresa Cienciamanía que contó, desde un primer momento, con el apoyo del Ayuntamiento de La Orotava.

Diez años después, una idea no muy común sigue siendo una de las actividades ineludibles de este municipio norteño que siempre se ha caracterizado por acoger a viajeros científicos, cultivar el arte y fomentar el conocimiento.

La idea de la feria de la ciencia, por contra, se alejaba mucho del abolengo y de las casas señoriales del centro de la Villa y exportó, desde sus inicios, un formato popular más cercano a los feriantes que a los ratones de bibliotecas o a la naftalina.

“Desde un primer momento esta feria nació con el espíritu de ser un evento abierto a todos los públicos y donde la ciencia se mezclara con el ocio, de manera que toda la familia pudiera pasar una jornada de domingo divirtiéndose y acercándose a la ciencia y a la tecnología”, explica la organización.

El triunfo lo dan los más de 3.000 visitantes de media que tienen cada año y las decenas de organismos públicos y privados de investigación y divulgación que participan cada año.

http://www.villadelaorotava.org/carteles/feria_ciencia.jpgAllí se han podido tocar las famosas restingolitas que surgieron tras la erupción volcánica de El Hierro de la mano de los científicos del Instituto Vulcanológico de Canarias (Involcan); se ha podido ver auroras boreales en 3D con unos vídeos aportados por el proyecto Shelios y por el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC); se han reproducido la indumentaria guanche con los talleres del Museo de la Naturaleza y el Hombre y se ha podido participar en emocionantes concursos de videojuegos con Innova7.

Además de descubrir los principios de la Física con las actividades propuestas por el Museo de la Ciencia y el Cosmos.

O de indagar cómo son las bacterias gracias a los investigadores del Instituto de Productos Naturales y Agrobiología del CSIC. ¿Quién da más?

Pues sí que hay mucho más. Entre molinos de viento y fósiles de barro, los niños van descubriendo qué es eso que se llama ciencia y los mayores van desterrando ese miedo a los laboratorios que tanto daño ha hecho a España y la ha convertido en el país que menos invierte en I+D+i+d. Este año habrá, además, cine y gastronomía.

Imagen ampliadaPremio internacional
Como si fuera casi un regalo por este aniversario, los responsables de la Feria de la Ciencia obtuvieron el domingo pasado la mención de honor del concurso internacional Ciencia en Acción organizado, entre otros organismos, por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). En un acto en el Paraninfo de la Universidad del País Vasco recibieron este premio el director de la Feria, Juanjo Martín; y la responsable de didáctica de Cienciamanía, Inma Gajate. Todo un broche de oro a diez años de trabajo que, como ocurre en todas las ferias, se monta y de desmonta en unas horas pero que requiere meses de organización.


Fuente: diaariodeavisos.com (Principia)